Plaza delimitada por casas de factura tradicional, con abundantes corredores y galerías. Es un espacio donde antaño se celebraba el mercado de ganado de Mieres, hasta comienzos del siglo XX.
Está situado a una cota inferior a la del nivel del Camino de Santiago, por lo que se accede a la misma a través de una escalinata.
Es una zona muy tradicional, con abundantes sidrerías, de ahí la lógica del emplazamiento aquí del monumento al escanciador.